La Valentía de Permanecer en la Barca: Jesús Aparece en tu Tormenta (Mateo 14:22-27)
Queremos hablar hoy de algo importante: el valor de la valentía que uno tiene que enfrentar en las circunstancias adversas que muchas veces vivimos.
La Biblia dice, en Mateo capítulo 14, versículo 22 en adelante, que los discípulos tuvieron que cruzar al otro lado de la ribera. Mientras cruzaban, dice que se levantó una tormenta. El viento sopló fuerte, las olas golpeaban la barca a tal extremo de casi darse vuelta.
Los hombres, aunque eran pescadores y conocían bien el mar, en ese instante sintieron miedo y se asustaron frente a la situación. Estaban solos, sin el Señor en la barca con ellos, y no sabían qué hacer.
El Encuentro en Medio de la Crisis
Estaban asustados hasta que apareció alguien. Vieron, vislumbraron a alguien en medio de esta tormenta que se acercaba a ellos. Al principio, se asustaron porque no sabían qué estaban mirando, pero luego escucharon la voz que dijo: «¡No tengáis miedo! ¡No temáis! Yo soy. Yo estoy contigo.» (Mateo 14:27, paráfrasis).
Amigo, joven, señorita, no sé en qué momento estás viviendo. ¿Cuál es tu problema, cuál es la situación?
- A lo mejor estás enfrente de un problema complicado y te han desahuciado los médicos.
- A lo mejor la situación económica que estás viviendo es caótica y no sabes dónde sacar recursos.
- Estás asustado, estás con miedo, estás espantado.
Yo quiero decirte que hoy puede aparecer Jesús en tu vida como apareció a los discípulos.
La Certeza de que Él Aparecerá
Te cuento hoy que puedo decir con experiencia personal propia lo importante de mantenerse en la barca. Mi situación no es la mejor, estoy pasando una enfermedad complicada, pero ahí estoy. No te digo que no he sentido miedo, temor o susto, pero tengo la certeza, seguridad y convicción de que aparecerá Jesús.
Estos hombres no sabían en qué momento Jesús aparecería de repente en su vida. Yo quiero decirte en esta hora: Jesús va a aparecer en tu vida. No te vas a dar cuenta, pero va a estar ahí para ayudarte y sacarte de este problema.
Dice que apareció Jesús, y todo fue calma, todo fue tranquilidad. Jesús subió a la barca y cruzaron hasta el otro lado.
Un Llamado a la Valentía y a la Fe Firme
Mira, yo te quiero decir: ¡No te bajes, amigo, hermano, no te bajes de la barca! Mantente arriba.
Esto es para valientes. Es para la gente que tiene valor, fe y confianza en su Dios.
Te invito a mantenerte confiado en el Señor. ¡Cristo viene por ti! Dios te bendiga y te dé muchas fuerzas para permanecer en la barca hasta que aparezca el Maestro. ¡Bendición!
¿Estás Enfrentando una Tormenta? Permanece en la Barca.
Si sientes que el viento sopla fuerte en tu vida (enfermedad, economía, miedo), recuerda que no estás solo. Jesús sube a tu barca y trae la calma. Te invitamos a buscar fuerza y fe en nuestra comunidad.
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