Todo lo Puedo en Cristo que me Fortalece: La Lección de Pablo desde la Cárcel (Filipenses 4:13)
Leemos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.» (Filipenses 4:13). ¡Digámoslo todos juntos: Todo lo puedo en Cristo que me fortalece! Amén. Señor, en esta hora quiero pedirte que tu Espíritu Santo se mueva a través de mí, Jesús, y que tú inspires mis labios para hablar tu poderosa palabra.
El apóstol Pablo también nos dice unas palabras tremendas, que me llegan a lo más profundo del corazón, en el capítulo 1, versículo 21: «Porque para mí el vivir es Cristo». Si juntamos estos dos versículos: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece» y «Porque para mí el vivir es Cristo», hacemos una oración poderosa. Pienso: «Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.» ¡Puede usted adorar al Señor!
El Contexto de Filipos: Una Iglesia Fiel y Misionera
El libro de los Hechos (Capítulo 16, entre el versículo 12 y el 40) registra la fundación de la iglesia de Filipos, establecida por el apóstol Pablo alrededor del año 51 d.C., durante su segundo viaje misionero. Era una iglesia que él fundó, levantó y le tenía mucho cariño.
Filipos era una iglesia misionera que apoyaba constantemente el ministerio de Pablo con bienes. El apóstol mantuvo con los filipenses una relación más íntima que con otras iglesias, porque estos suplían sus necesidades. Desde varios puntos de vista, esta carta (Filipenses) es una de las más hermosas que haya escrito, llena de ternura, calor y afecto.
La Paradoja de la Libertad: Un Predicador Hebreo Encarcelado
El apóstol Pablo le está hablando a sus queridos hermanos desde una cárcel, lo más probable en Roma.
Si hay algo que el hebreo disfrutó al salir de Egipto fue su libertad. Dejaron una vida de esclavitud, de malos tratos y del anonimato, para pasar a ser la nación del Dios Todopoderoso, habitando una tierra prometida donde fluye leche y miel. Pero avanzamos en el tiempo y encontramos a este predicador hebreo encarcelado por una sencilla razón: predicar el evangelio de Jesús.
Jesús nunca dañó a nadie. Fue manso, llevado como cordero a la cruz, derramó su sangre por todos, trayendo vida eterna y salvación a través de su sacrificio por la humanidad. Sin embargo, a Pablo le fue quitada su libertad por predicar este evangelio.
Peligros y Padecimientos del Apóstol Pablo
El encarcelamiento de Pablo muchas veces fue con violencia, instigado por los propios judíos. En Gálatas 6:17, Pablo dice: «De aquí en adelante nadie más me cause molestias, porque yo traigo en mi cuerpo las marcas del Señor Jesús«.
Él mismo registra: «De los judíos he recibido cinco veces cuarenta azotes menos uno (195 azotes). Tres veces he sido azotado con varas; una vez apedreado; tres veces he padecido naufragio… En camino muchas veces, en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de la nación, peligros en el desierto, y peligros entre falsos hermanos«.
La Gran Lección: Cómo el Cristiano debe Enfrentar la Vida
En medio de todo este padecimiento, Pablo, encarcelado, nos da una lección de cómo el cristiano tiene que enfrentar la vida.
Yo me imagino preguntándole: «Pablo, ¿por qué soportas todos estos azotes?» Y él responde en Filipenses: «Porque me preocupa la iglesia, por predicar el evangelio.» Esas rejas lograron quitarle la voz de las calles, pero la sustancia de su mensaje se plasmó en estas cartas que hasta el día de hoy dan forma, solidez y firmeza a la iglesia de Cristo. Y nosotros seguimos manteniendo el eco de estas palabras: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.»
El Conflicto de Pablo: Vivir es Cristo, Morir es Ganancia
Pablo está a las puertas de la muerte y les comenta a los hermanos de Filipos (v. 22): «Más el vivir en la carne (seguir con vida) resulta para mí en beneficio de la obra… no sé entonces qué escoger.»
Pablo dice: «No sé por cuál decidir, si por la vida o por la muerte.» Para él es tan valioso estar vivo para que la fe de ustedes se afirme, pero sabe que, estando muerto, tendrá el encuentro con Jesucristo. Él sabe que su permanencia es para el provecho de la fe de los filipenses.
La Única Petición: Que su Manera de Vivir esté de Acuerdo con el Evangelio
El apóstol les dice una cosa en Filipenses 1:27: «Solamente esto… procuren que su manera de vivir esté de acuerdo con el evangelio de Cristo«. Les pide que sigan firmes y muy unidos, luchando todos juntos por la fe del evangelio.
Sufrir por Causa de Cristo: Una Bendición y Señal de Salvación
Pablo les da una recomendación crucial: «Sin dejarse asustar en nada por sus enemigos… pues por causa de Cristo ustedes no solo tienen el privilegio de creer en él, sino también de sufrir por él«.
Amados hermanos, usted va a sufrir por Cristo, y tiene la bendición de vivir para Cristo y de sufrir también por Cristo. ¿Cómo vivo yo la prueba, la necesidad? ¿La vivo en Cristo o no la vivo en Cristo?
Pablo dice: «Yo estoy entre la vida y la muerte, a veces no tengo, pero lo vivo en Cristo. Para mí vivir es Cristo, todo lo puedo en Él que me fortalece.» Para el que ha nacido de nuevo, todas las cosas se viven en Cristo: la prueba, la dificultad, la abundancia, la escasez, la enfermedad, la salud.
Conclusión y Llamado: Vuelve al Camino y Encuentra tu Gozo en el Señor
Quizás nosotros no estamos en una cárcel física como Pablo, pero muchas veces estamos en prisiones que este ojo no puede ver. Pero quiero decirte una cosa: Dios sabe lo que a ti te está sucediendo y espera una reacción de tu parte.
Tú puedes decir: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.» ¿Te quedas ahí, o te paras y sigues caminando? Lo valioso de la prueba es que aun con todas estas dificultades, tu gozo va a venir de parte del Señor, y este gozo va a ser tu fortaleza.
¿Por qué estás callado? ¿Por qué ya no hablas del Señor? Hay cosas que van a querer tapar tu boca, van a querer silenciar a la iglesia de Cristo. Pero el que tiene al Señor en su corazón va a salir de dentro de él un ¡Aleluya! ¡Un Cristo vive! Aun en medio de los problemas y las pruebas.
El apóstol Pablo vivió las bienaventuranzas en su carne: «Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.»
Hoy se necesitan hombres que puedan decir: «Para mí el vivir es Cristo», que esté el Señor primero que todo. Si pasamos dificultades y pruebas, es porque hemos hecho a un lado a Jesús. «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.»
Amado hermano, solo sal de aquí esta noche diciendo estas palabras: Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Cuando venga el enemigo y te proponga una prueba, repite: Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.
Si este mensaje tocó tu corazón, te invitamos a unirte a nuestros servicios. ¡La fortaleza en Cristo está disponible para ti!
***
## ¿Necesitas la Fortaleza de Cristo en Persona?
Si este mensaje te ha inspirado, te invitamos a vivir la experiencia de fe y comunidad junto a nosotros. Únete a nuestros servicios.
**👉 Ver Horarios y Ubicación de Templo Belén**
### ¿Tienes una Petición de Oración?
Tal como el Apóstol Pablo se enfocaba en la obra, queremos apoyar tu vida de fe. Si estás pasando por una prueba o necesitas aliento, déjanos orar por ti.
**🙏 Envía tu Petición Aquí**
Leave a Reply