Busca Su Presencia: La Necesidad Mayor del Corazón (Hechos 13:22)
Pastor David Ponce
La palabra del Señor, en el libro de Hechos capítulo 13, versículo 22, dice así:
«Quitado este, les levantó por rey a David, de quien dio también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón, quien hará todo lo que yo quiero.» Amén.
Dios siempre anda buscando a alguien. Él dice: «He hallado a David conforme a mi corazón.» Antes de David pasaron muchos que, según el hombre, podrían haber sido ungidos: hombres de músculos, con espada y armadura. Pero Dios se fija en este jovencito.
Esto nos enseña que lo que va por fuera no importa mucho, sino lo que está en tu corazón.
I. Varón Conforme al Corazón de Dios
David metió la pata, la embarró, pero Dios dice: «Encontré uno conforme a mi corazón.» Esto significa que nos podemos equivocar, pero lo importante es no quedarse en el error ni en el pecado, sino levantarse y ser valiente.
A. La Necesidad Mayor
Usted llega hoy a la casa del Señor con muchas necesidades: salud, dinero, problemas amorosos, fracasos. Todas son necesidades que deben ser suplidas.
Pero por sobre todas esas necesidades materiales, hay una necesidad mayor en usted y en mí, y esa es la necesidad de Dios.
Si usted tiene a Dios, ¡tiene todo! Yo le pregunto: ¿Necesita usted a Dios más que dinero? ¿Más que salud? Si usted tiene el Espíritu de Dios, podrá seguir mirando hacia adelante, porque todo le puede faltar en la vida, pero lo que no le puede faltar es el Espíritu de Dios.
B. Llenando el Vacío
Le preguntaron a un hombre muy rico, un general de renombre, qué se sentía haberlo logrado todo. Él respondió: «Me siento vacío.»
A veces, para llenar ese vacío, vamos al mall y compramos algo que no necesitamos. La compra dura un rato, pero el vacío sigue ahí. Lo único que llena el vacío del corazón se llama Espíritu de Dios.
Su Dios decidió dejar los grandes templos para habitar en usted, en su corazón. La presencia de Dios no se limita a un espacio, sino que está encerrada dentro de nosotros.
II. David: El Adorador que Buscó la Presencia
Si hay alguien que conocía la importancia de la presencia de Dios, ese era el Rey David. Para él, la presencia estaba representada en el Arca del Pacto.
David era:
- Valiente y de armas tomar.
- Un muchacho humilde y obediente (con las ovejas).
- Un adorador (atraía la presencia de Dios con su música).
- Fiel y puro.
David hizo algo que ningún otro rey hizo: entendió la importancia de la presencia de Dios. Tú puedes vivir tu día a día como el mundo, o puedes saber que Su Presencia es lo más importante que tienes.
A. ¡Vamos a Buscar el Arca!
David dijo: «Voy a ir a buscar la presencia de Dios y me la voy a traer para mi ciudad, para Jerusalén.»
Cuando usted necesita algo importante, lo va a buscar. De igual manera, cuando usted necesita la presencia de Dios, ¿qué tiene que hacer? ¡Buscarla!
En el primer intento, el arca iba en una carreta. Uzá tocó el arca y murió. David se llenó de temor y la dejó en casa de Obed-edom por tres meses. El arca, que debía traer vida, trajo una muerte, y David dudó.
B. El Poder de la Presencia
Dice la palabra que Jehová bendijo a Obed-edom y a toda su casa. ¡No murieron, sino que fueron bendecidos a través de la presencia de Dios!
Al enterarse, David se apresuró a buscar el Arca. ¿Por qué era importante? La presencia de Dios desata bendición, termina con las enfermedades, sana tu tierra y todo prospera. Su presencia te asegura la victoria.
C. La Danza del Adorador
David llevó el Arca con alegría. Cuando los que la llevaban habían andado seis pasos, David sacrificó. David presentó ofrenda a Dios.
Luego, David danzaba con todas sus fuerzas delante de Jehová.
- Dejó la realeza.
- Se vistió de adorador.
- Perdió la compostura.
- Dijo: «Yo le danzo a mi Rey.»
No importa si soy corista, doctor, o contador; cuando la presencia de Dios está, yo me muevo conforme a Su presencia. ¡No importa que digan lo que quieran, yo le danzo a mi Rey!
III. La Promesa: Me Buscarán y Me Encontrarán
El Señor nos invita a buscarle. Jeremías 29:13 dice:
«Me buscarán y me encontrarán cuando me busquen de todo corazón.»
Dios no está escondido. Su presencia no está escondida.
Salmo 63:1 (NVI) dice:
«Oh Dios, tú eres mi Dios; yo te busco intensamente. Mi alma tiene sed de ti, todo mi ser te anhela, como la tierra seca.»
A. Los Frutos de Su Presencia
Separado de Su presencia, nada podéis hacer (Juan 15:5).
La presencia de Dios en tu vida no solo te bendice a ti, sino a toda tu familia, a tus hijos y tus cosas.
- Todo prospera.
- Trae paz.
- Trae amor y cariño.
- Trae salud, milagros, sanidad y libertad.
- Trae bautismo, lenguas, danzas, dones y frutos.
B. ¿Cómo Buscar Su Presencia?
La presencia de Dios se busca:
- De rodillas (oración intensa).
- Renunciando a lo que te aleja del Señor (pecado, malas prácticas, mentira, horóscopos, hechicería).
- Diciendo: «Tú eres mi único Dios, a Ti te sirvo.»
Te invito a ser como el Rey David y buscar esa presencia, buscar esa gloria.
¿Anhelas la Presencia que lo Transforma Todo?
La bendición de la presencia de Dios está disponible para ti y tu familia. Si quieres vestirte de adorador y dejar la inconstancia, te invitamos a buscarle con nosotros.
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¿Estás Listo para Dejar lo que te Aleja de Dios?
La presencia se busca renunciando. Si necesitas ayuda y oración para arrepentirte y dejar el pecado, queremos apoyarte en el camino de la rectitud.
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